¿Qué son los celos?
Se definen como un doloroso sentimiento de temor a ser reemplazado o engañado. El sentimiento es diferente al de la envidia.
En otras palabras, los celos son el miedo a perder lo que ya tenemos, mientras que la envidia es la necesidad de obtener lo que nos gustaría tener. La persona envidiosa siente que le falta algo que desearía (un beso, una caricia, ser amado, amar, etc.).
Las personas celosas viven en la angustia de poder perder este estado de bienestar.
Universal, pero inútil
Los celos son una emoción que todos sentimos en un momento u otro. Es una grande o pequeña sensación de pellizco en el estómago que se siente a pesar nuestro.
Mitos acerca de los celos
Prueba de amor
A menudo escuchamos personas que justifican sus celos como una demostración de amor hacia su pareja. En primer lugar, hay que dejar claro que los celos no son una prueba de amor hacia nuestra pareja. Por el contrario, se trata de una falta de amor por uno mismo. Sentir celos por otra persona demuestra una falta de confianza en uno mismo, ya que la persona no reconoce su valor y tiene la impresión de que su pareja quiere reemplazarle por otro cuando se presente la oportunidad. Esto supone que consideremos al otro como una amenaza para la estabilidad de nuestra relación.
Demostramos preocupación, miedo y temor cuando expresamos nuestros celos a nuestra pareja. Por el contrario, una persona con autoestima alta no es celosa. Se siente segura en sus relaciones y demuestra su amor a la otra persona, y no sus celos creados por un sentimiento de inseguridad.
Los celos protegen contra la infidelidad
Algunos explican que sus celos les permiten protegerse de las infidelidades de su pareja. Una vez más, esto no podría estar más lejos de la verdad. Los celos conducen el interrogatorio, las sospechas injustificadas, el monitoreo constante y la falta de confianza en el otro.
Estos comportamientos tienden a empujar a nuestra pareja hacia otra persona, porque se sentirá insatisfecha con su relación con un celoso.
Los celos consiguen justo lo que más tememos: podemos perder nuestra pareja. Por otra parte, no es raro que la otra persona ante un control tan incesante, piense en ser infiel. Por lo tanto, los celos pueden crear la infidelidad en lugar de evitarla.
Obviamente, gran parte de la infidelidad pertenece a la persona que tuvo relaciones extramaritales. Por contra, las personas celosas deberán reconocer el impacto que tienen sobre su pareja.
La falta total de celos muestra el desprendimiento y la indiferencia
“Yo amo a mi pareja y tengo celos para demostrarle que me preocupa”. Esta frase típica es tan falsa como decir que los celos son un signo de amor.
Se creen que demostrando sus celos demuestran que la otra persona no les es indiferente. Sin embargo, existen maneras más sanas de dar y recibir atención por parte de la pareja.
Urdir un plan para hacer sentir celos a nuestra pareja no demuestra una dinámica equilibrada. Es paradójico, desagradable y doloroso que queramos llamar de esta manera su atención y su amor.
Confías en tu pareja, pero no en los demás
Una persona celosa expresa confianza hacia su pareja, pero no hacia los otros que pueden estar al acecho a su alrededor.
Extraño modo de pensar, ¿no?
Una pareja no es algo que se deba proteger ante los demás. Todo el mundo es capaz de tomar decisiones sobre sus acciones cuando se enfrenta a la elección de ser fiel o infiel.
Además, las personas que seducen a otras personas no deben entrar en argumentos para justificar sus celos. En primer lugar, quizás no sean conscientes de su estado civil. En segundo lugar, la promesa de lealtad se hizo entre tú y tu pareja y no con el resto de la población.
En tercer lugar, no tenemos el control sobre los demás y eso incluye a tu pareja. Por tanto, debemos confiar en que él o ella evitarán cualquier comportamiento que conduzca a la infidelidad.
Si no puedes confiar en el otro en este sentido, es necesario que te preguntes cómo te imaginas la situación en la que tu pareja se deja seducir. ¿Cómo lo hará él o ella?
En circunstancias opuestas, ¿te dejarías seducir por otra persona? ¿Cómo reaccionarías? Hay ciertas personas o parejas que proyectan en el otro su propia incapacidad para permanecer fieles. Por lo tanto, hay personas más limitadas por su pareja que por sí mismos.
A recordar sobre los celos
Es importante entender que probablemente siempre existirán sentimientos de celos. Pocas personas están completamente seguras de sí mismos en todos los puntos. Todos tenemos heridas que nos hacen sentir emociones desagradables, incluyendo los celos.
Sin embargo, es importante no reducir la satisfacción de nuestra relación mediante la generación de comportamientos destructivos. Es importante que no justifiquemos nuestra conducta celosa afirmando lo hacemos por el bien de la pareja. Además, es fundamental que trabajemos en nuestra relación y nuestros celos.
La fidelidad y celos
La importancia de la fidelidad que define el matrimonio
La fidelidad se define como el cumplimiento de los compromisos con una persona. En la mayoría de las relaciones, no es una forma de lealtad. Por contra, los comportamientos que un individuo puede considerar como infieles varían ampliamente.
De hecho, nuestra percepción de la lealtad es diferente en cada persona. Los comportamientos considerados infieles son largos y las combinaciones infinitas. Algunas personas consideran infidelidad coquetear con alguien que no sea su pareja, mientras que para otros sólo si hay relaciones sexuales se trata de infidelidad.
Otros perciben la infidelidad como un apego romántico y no por una atracción sexual. A veces la lealtad no siempre se define por el comportamiento, sino por las intenciones que la persona puede tener en el comportamiento. Los ejemplos son ilimitados y pueden variar de una relación a otra.
Por esta razón, es muy importante que las parejas conversen sobre sus percepciones de la lealtad. Es un paso esencial que, a menudo, se pasa por alto en las relaciones serias. Algunos incluso evitan el tema por temor a conocer las opiniones de su pareja al respecto y provocar una discusión. Esto puede ocasionar dificultad en la intimidad.
También es relevante analizar las reacciones de cada uno hacia la infidelidad, y las consecuencias para la relación (ruptura, terapia de pareja, continuidad de la pareja, aceptación, etc.).
Discusión difícil
La clave de la fidelidad está en los valores fundamentales de los individuos. También puede traernos recuerdos que pueden ser dolorosos y tristes en relación con traiciones y grandes decepciones.
Podemos hacer frente a las diferencias entre nosotros y nuestra pareja que consideraremos fidelidad. En estos litigios puede sentirse inseguro uno de los dos, por lo general el que tiene una definición más restringida.
Esta conversación se basará en el respeto que cada uno deberá tener sobre los puntos de vista del otro con respecto a este tema. También deberemos determinar nuestra perspectiva sobre el comportamiento que consideramos infiel.
Por contra, algunas parejas tienen definiciones de fidelidad iguales y la conversación no conduce a conflicto. En las situaciones en que los límites están claros, los celos ya no deberían tener un lugar en la pareja.
Si los dos están de acuerdo en su percepción de los comportamientos, intenciones y acciones de respeto, la confianza deberá prevalecer en la pareja. Los celos son una emoción universal en los seres humanos, pero no son buenos en una pareja de enamorados.
¿Cómo manejar la diferencia?
Nadie quiere vivir una traición y las emociones abrumadoras que siguen. Cuando hay divergencia en nuestros puntos de vista con respecto a la fidelidad, es necesario encontrar puntos comunes pensando en el futuro.
Aunque nuestras definiciones tengan diferencias, tendremos que entender que es necesario aceptar y tolerar algunos elementos, aunque vayan en contra de nuestros valores, si queremos mantener la relación.
¿Cuáles son las diferencias entre tu pareja y tú? ¿Qué eres capaz de tolerar? ¿Se pueden respetar las diferencias si no se llega a un acuerdo? ¿Cómo te imaginas que tu relación va a crecer?
Como la lealtad es parte de casi todas las relaciones a largo plazo, es esencial tener una conversación sobre las intenciones y percepciones de cada uno con respecto al otro. Esta conversación aunque puede ser difícil y ocasionar una ruptura, a menudo evita las disputas, desacuerdos y sentimientos de celos.
Además, aclara el compromiso que tiene el uno con el otro. Sin embargo, algunas personas todavía sienten los mismos celos después de la conversación
Cómo controlar los celos
Sentir celos es una emoción que no podemos controlar, pero que podemos manejar a pesar de nosotros mismos. Algunas personas tienen celos en exceso y esto puede causarles problemas en relaciones de trabajo, amistad, familia, amor y sexualidad. Mientras que otros, tienen debilidad en un solo tipo de relación.
Teniendo en cuenta que existen celos en los múltiples ámbitos de relación y que crea desafíos diferentes para cada uno, nos limitaremos al amor y los celos sexuales.
Efectos de los celos en las relaciones románticas
No se necesitará tener unos celos excesivos para perpetuar los efectos nocivos sobre la pareja. Los celos siempre nacen de la inseguridad de la persona que los siente pero que, a menudo, culpa a otros para justificar su comportamiento. Esto creará conflictos en la confianza de la pareja, acusaciones injustificadas, interrogatorios, necesidad excesiva de ser validado en la lealtad de nuestra pareja, falta de libertad y así sucesivamente.
Ciertos individuos incluso limitan el pensamiento de la pareja creyendo que las fantasías sexuales con una tercera persona son un sentimiento de infidelidad.
Estas restricciones demuestran una baja autoestima y falta de confianza en la pareja, que tendrá consecuencias difíciles a medio o largo plazo. Con el tiempo, la pareja ya no se sentirá capaz de ser y vivir libremente, y su vida armoniosa y satisfactoria desaparecerá lentamente.
Es cierto que hay parejas que logran estar juntas a pesar de las limitaciones que se imponen. Por contra, ¿tienen sensación de bienestar en su relación? ¿Cómo viven la sensación de inseguridad perpetua? ¿Acaso los dos se sientan libres para ser ellos mismos? ¿Les gusta la sensación de ser observados constantemente?
Los celos, posiblemente, podrán crear descontento en el que tenga más libertad y deseo (a menudo sexual), mientras que en el otro caerán o incluso desaparecerán. Por ejemplo, no va a querer tranquilizar a la otra persona, se negará a acercar posiciones y, a veces, incluso mentirá sobre sus salidas para comprar la paz en la pareja.
Para muchos, la sensación de tener que demostrar que sus sentimientos son sólo para el otro, reduce su atracción sexual. La compasión puede ponerse por encima de la admiración.
Cómo evitar los celos y dominarlos
Los celos son una emoción dolorosa y difícil de manejar. Su origen, a menudo demuestra los lados de nuestra personalidad.
Los celos son una emoción destructiva no sólo para nuestras relaciones, sino para nosotros mismos. Con los celos exteriorizamos comportamientos desagradables que dañan nuestra relación.
En primer lugar, al igual que todas en las dificultades interpersonales, hay que reconocer su propia participación en la dinámica amorosa. Tenemos que dejar de echarle la culpa a la pareja y enfrentarlo uno mismo. Tenemos que aceptar y reconocer nuestro valor ante los ojos de nuestra pareja y demostrar lo que valemos por nosotros mismos.
Esta tarea es difícil porque para el ser humano es más fácil recordar los insultos, las burlas y los juicios en su contra, que las felicitaciones, muestras de cariño y el amor que se recibe del otro. Una persona celosa siente la necesidad de ser tranquilizada y valorada por su pareja para sentirse amado.
Cuando uno valora al otro logró calmar sus inseguridades y angustias de forma temporal. A largo plazo, esto es malo para una pareja que quiere prosperar personal, relacional y sexualmente. Las parejas en las que cada uno logró valorarse mediante el reconocimiento y la aceptación de sus méritos, sus defectos y los de su pareja, evita dolorosos sentimientos de celos.
Debemos reconocer nuestras virtudes y aceptar nuestros defectos. Esta tarea, para algunos, es un trabajo pesado y laborioso que puede requerir la ayuda de un terapeuta sexual mediante terapia. ¿Cuáles son tus puntos fuertes en una relación? ¿Qué le gusta a tu pareja de ti? ¿Qué defectos te hacen frágil y podrían influir en tus sentimientos de celos? ¿Cuáles son tus virtudes? ¿Cómo gestionas tus celos?
Varios conceptos erróneos acerca de la pareja pueden causar dificultades en el sentimiento de los celos. Tenemos que entender que no podemos responder a todas las necesidades de nuestra pareja y viceversa.
Es difícil aceptar esta realidad, pero hay que reconocer que no somos los únicos que podemos satisfacer las necesidades de nuestra pareja.
Este sentido de singularidad que nos hace sentir especiales, crea falsas expectativas en la pareja. Por lo tanto, cuando uno percibe un comportamiento que puede destruir esta ideología, surgen los celos para restaurar nuestra visión errónea de las relaciones.
Las personas celosas tienen dificultad para aceptar esta verdad de la pareja. Es un error creer que podemos satisfacer todas las necesidades de nuestra pareja en todos los aspectos de su vida.
Consejos para controlar los celos
Los celos provocan mucha angustia en una relación y perjudica la estabilidad y el desarrollo personal, relacional y sexual.
El comportamiento celoso se evita:
Reconociendo nuestras cualidades y aceptando nuestros defectos.
Sintiéndonos bien con nosotros mismos.
Teniendo expectativas y percepciones realistas de nuestra pareja y nuestra relación.
Las personas que quieren vivir una vida plena en todos los aspectos deben trabajar sus celos. Esto te ayudará a apreciarte más a ti mismo y a tu pareja. Para poder amar a los demás debemos tener la capacidad de poder confiar en ellos.
